Agotados los diez mil primeros folletos de la Ruta de la Tapa

Hay cinco mil más para repartir en agosto

Los diez mil primeros folletos elaborados para difundir la Ruta de la Tapa se han agotado en los primeros quince días de la puesta en marcha de la iniciativa, debido a la alta demanda de los establecimientos que participan en la edición de 2009, así como de los ciudadanos, que los retiran, sobre todo, de las tres oficinas de turismo (calle Vega, Novo Sancti Petri y Centro de Interpretación del Litoral).



Hay cinco mil folletos más para distribuir por los establecimientos, oficinas de turismo, recintos donde se lleven a cabo actos culturales o lúdicos, etcétera. El objetivo, teniendo en cuenta que la llegada de visitantes es progresiva durante todo el verano, es prolongar los repartos durante todo el verano, para que pueda llegar a todos los turistas.

La Ruta de la Tapa cuenta este año con varias novedades, entre ellas la difusión de un folleto mucho más atractivo, con fotografías de las tapas que ofertan los veintitrés establecimientos participantes y con la organización de diversas “mini rutas” para que quienes no conocen la ciudad encuentren más facilidades a la hora de acudir a varios bares durante un corto espacio de tiempo, aprovechando la cercanía entre ellos.

Además, a cada establecimiento se le ha entregado un póster donde figura la tapa que ofrece, con el fin de que pueda exhibirlo en sus escaparates, y se está realizando una amplia campaña de difusión en los medios de comunicación (menos en PUENTE CHICO, claro).

También se ha incrementado el capítulo de premios, ya que además de libros de cocina, habrá cenas, relojes, lotes de productos de bebidas, tratamientos de belleza, etcétera. Quienes decidan participan en el concurso (deben visitar al menos 10 establecimientos y obtener el correspondiente sello) han de entregar las cartillas convenientemente selladas en las oficinas de Turismo.

Ya están dando los primeros pasos para crear la ruta de la tapa de invierno, en la que los establecimientos ofertarán tapas distintas a las del periodo estival, más apropiadas para ser degustadas con temperaturas más bajas, como por ejemplo los típicos guisos chiclaneros.