Las veleidades de Román llevan a aprobar la reducción de sueldo del equipo de gobierno cuando momentos antes había defendido lo contrario

Había justificado lo que cobran los gobernantes, pero cambió de opinión tras oír a la concejala de Hacienda hablar de la deuda dejada por él

El pleno de septiembre celebrado ayer jueves ha vuelto a demostrar que algunos políticos no dan la talla para sentarse en ese salón y mucho menos para ser nuestros representantes. Oír algunos de los discursos o intervenciones provoca vergüenza ajena, pero mucho peor es cuando un concejal, que ha sido durante siete años nuestro alcalde, cambia de opinión y con ello obliga a hacer lo mismo a sus restantes compañeros, votando a favor de algo que momentos antes había dicho que lo haría en contra, argumentando los motivos.


Pongámonos en situación. Pleno de septiembre, IU propone que el equipo de gobierno y los altos cargos se rebajen el sueldo un 20% debido a la crisis galopante del Ayuntamiento. El PSOE se ha mostrado en contra hasta ese momento y en la intervención del portavoz, José María Román, vuelve a incidir en que los sueldos del equipo de gobierno están bien, que deben seguir cobrando lo mismo y que así está pactado en la Federación Andaluza de Municipios y Provincias o la FEMP, no recuerdo bien.

Su disertación es claramente contraria a que Marín y sus ediles se bajen el sueldo, quizás porque sería difícil explicar que esté a favor cuando él no se lo bajó cuando se lo pidieron y también había crisis, porque ésta no ha nacido el 23 de mayo o cuando el PP tomó el poder. Pues no, a Román le da igual lo que los ciudadanos puedan pensar y así lo ha demostrado durante sus años de alcalde y ayer en el pleno.

Pero donde digo no cinco minutos después digo sí y si antes no quería que se bajaran los sueldos ahora digo lo contrario. Total, que votó a favor de la propuesta de IU y así lo hicieron también los nueve ediles del PSOE, que siguieron como corderitos esta veleidad romaní.

Hay que reseñar que el cambio del PSOE, mejor dicho de José María Román, fue porque se sintió atacado por la concejala de Hacienda, Ascensión Hita, al enumerar ésta todo lo que el Partido Popular había hecho desde el primer día que llegó a la alcaldía y se encontró con la deuda de 156 millones de euros y que no había dinero para pagar a los empleados de la Gerencia de Urbanismo.

Al ex-alcalde no le gustó que le dijeran que había dejado con telarañas las arcas municipales y en la réplica, en un discurso difícil de seguir ya que se dedicó a “cantinflear”, terminó diciendo que iba a cambiar su voto, contrario hasta ese momento a que se bajaran el sueldo el equipo de gobierno.

Román, haciendo el veleta, cambió el voto y la petición que iba a ser desestimada por no recibir el apoyo del PP y PSOE, ha sido aprobada finalmente. Este cambio de Román Jerónimo Andreu, concejal socialista, lo alabó diciendo que era una prueba de “cintura política” del portavoz del PSOE. Las veleidades de Román ahora tienen otro nombre. Y sus compañeros de bancada, todos a una, votaron a favor de la reducción de sueldos cuando hasta un minuto antes iban a votar a favor de que siguieran cobrando lo mismo.

Esta actitud de los socialistas choca porque con ello no se sabe si es que pensaban votar la propuesta de IU pero quisieron engañar al PP diciendo que estaban en contra, o que demostrando su “coherencia” de estos últimos años, cambian de opinión dependiendo de cómo sople el viento y que en realidad lo que se lleva a pleno le importa un pimiento. Estos son los políticos que tenemos, y encima se permiten el lujo de criticar.