Antonio Ríos: “El hijo del vicepresidente intentó pegarme porque le recriminé que no trabajara y ahí empezó todo”

El presidente de los parados está molesto por los ataques personales y quiere arreglar este asunto.-

El todavía presidente de la Asociación de Parados, Antonio Ríos, ha realizado unas declaraciones a PUENTE CHICO Digital, defendiéndose de las acusaciones formuladas contra él por una parte de los socios de la entidad, tras la asamblea del pasado 27 de septiembre, que tuvo que ser suspendida por los incidentes que se produjeron tras pretender éste que votaran asociados que no estaban al corriente de pago, cuando él mismo había firmado un documento  en el que se decía todo lo contrario.

Antonio Ríos manifestó que todo empezó este verano: “En la playa repartimos las zonas de aparcamiento entre los socios. En unas acordaron que cada uno se llevara lo que cogiera y en la mía que se repartiera el dinero conseguido entre todos a partes iguales.

El hijo del vicepresidente, Miguel Montero, del mismo nombre, estaba tirado debajo de un pino, por lo que le pedí que se le levantara, que allí íbamos a trabajar”.

La reacción de Montero fue “quererme pegar, por lo que se lo dije a su padre y le pedí que lo echara del grupo por agresivo, ya que no podía estar asustado todos los días, sin saber cuándo me iba a pegar”. El padre le respondió que “no le salía de sus partes”.

Pocos días después, Ríos tuvo problemas con otro socio, amigo del anterior, “que vino a pegarme también, además de amenazarme e insultarme”. Ante esto, “decidí convocar unas elecciones y le dije a Antonio López Ariza y a Pepe Blanco que iba a presentar la dimisión, pero me aconsejaron que no lo hiciera, que lo estaba haciendo bien y que sin mí, la asociación se iba a hundir”.

ATAQUES PERSONALES

Sin embargo, “al día siguiente, López Ariza escribió en un foro de internet y me acusó de incompetente, borracho y dictador”. No entiende Ríos que “el día antes me pidiera que me quedara y al día siguiente dijera esto y me atacara personalmente”.

Respecto a las votaciones, afirmó Ríos que pensaba que podían votar todos los socios, al corriente de pago o no, que le pidió a Blanco un documento que recogiera esto “pero no me lo quiso enseñar”.

Este medio le enseñó la carta firmada por él mismo, en la que se contemplaba que si no estaban al corriente de pago no podían votar, aunque si debían menos de tres meses podrían abonar la cuota adeudada en ese momento, y si debían más de tres meses entonces tenían que ponerse al corriente dos días antes de las votaciones.

Ríos reconoció a PUENTE CHICO que no había llevado la cartaa la asamblea y que “la firmé sin leerla, mal hecho por mi parte”.

El presidente de la entidad de parados, finalmente, señaló que “les pido a estos señores, por favor, que dejen de atacarme, estamos intentar arreglar este asunto, lo que he convocado son unas elecciones, no una guerra”.