Partiendo de la base [colaboración].-

Fumanchú, el CHINAclero disconforme [colaborador].- 

Partiendo de la base de que ya esto está totalmente destapado, de que la claridad ya es cristalina, de que ya no le quedan argumentos para rebatir nada, de que los pocos argumentos que le quedan ya sólo son meramente argumentos infantiles.

Partiendo de la base de que nunca, nunca nos dieron nada y de que nunca los votamos a ellos porque en las listas de cualquiera de los dos partidos podía estar tranquilamente el conde Drácula, Fantomas o Don Pin Pon y de igual manera hubiesen salido.

Partiendo de la base de que ya sabemos de qué pata cojean todos, de que se puede generalizar tranquilamente metiéndolo a todos en el mismo saco, de que no se puede esperar nada y de que el futuro con ellos está más negro que tiznao.

Partiendo de la base de que ya no se puede escuchar ningún discurso por muy bien expuesto y planteado que esté si el que lo plantea mete en su casa más de 4.000 euros mensuales.

Partiendo de la base de que este sistema ha estado mal aplicado institucionalmente desde principio y de que las buenas esperanzas que pusimos en él, hizo que se convirtiera en un espejismos en todas las materias de justicia, igualdad y derechos.

Partiendo de la base de que se puede decir que el que tiene las manos limpias es tan malo y tan perro como el que las tiene sucias por desentenderse y por omitir y por decir que la cosa no iba con ellos.

Irse ya. Hombreeeeee… Irse ya tooo y no quedar ni uno y devolver lo os habéis comido entre todos para que podamos empezar de cero otra vez. Ya que la vergüenza no va con ustedes, ni la honestidad.  Irse ya aunque sea, por lo menos, por decencia. A alguno de nosotros eso de empezar de cero le va a resultar fácil.

Empieza una nueva era, se acabó la política de partir de la base de las promesas, el panfleto barato, los besitos, los abrazos, las afotitos para que después de negar una crisis y no poner medios para combatirla encontrase con el derecho de recortarnos a todos por la parte que más os convenga y menos os afecte.

La culpa es nuestra, dicen. Que vivimos más allá de nuestras posibilidades y que entre todos la matamos y ella sola se murió.

A mí, desde luego, que no me vayan a decir ninguno de ellos la frasecita de que el que esté libre de pecado que tire la primera piedra, porque más de uno se iba a llevar er piñazcazo de su vida.