Logo Derecho - Bann

Al salir del cine: SIMPÁTICOS Y DECRÉPITOS (Plan en Las Vegas)

César Bardés [colaborador].-

No es fácil llegar a una edad en la que el hijo te trata como si fueras un niño, o en la que te ves incapaz de llegar a ninguna parte con tu mujer no por una cuestión física, sino por otra de ilusión; o en la que soledad te recuerda a cada instante que no tienes a nadie salvo a tus recuerdos; o, si nos ponemos picajosos, en la que sientes la necesidad de casarte con una chica mucho más joven para decirte a ti mismo que no eres tan viejo. El caso es que aún es mucho más difícil tener un reparto con nombres como Michael Douglas, Kevin Kline, Morgan Freeman y Robert de Niro y hacerlo rematadamente tan mal.

Y es que, a veces, los responsables de una película parecen tan decrépitos como los personajes de los que se tienen que hacer cargo estas cuatro personalidades del cine. Ellos hacen lo que pueden, tienen algún momento brillante, ninguno desternillante, aportan mucha clase, se lo han pasado descaradamente bien pero el resultado es tan pobre, tan decepcionante que ni siquiera uno se puede agarrar al buen rato que te pueden hacer pasar cuatro veteranos que saben infinitamente más que cualquiera que se ha situado detrás de las cámaras.



Todos ellos tienen instantes inspirados en los que demuestran lo que han sido y lo que siguen siendo, por mucho que los absurdos tiempos que corren se empeñen en afirmar lo contrario. Es estupendo comprobar cómo Kline hace amistad con unas cuantas reinonas con la facilidad de quien se toma una copa entre luces de neón, cómo Douglas se esfuerza en ser el tipo encantador, eternamente joven y, paradójicamente, prematuramente viejo que intenta desesperadamente agarrar los pocos síntomas de juventud que aún le quedan, cómo Freeman se marca un baile al son de los Earth, Wind and Fire que nos deja a los que tenemos treinta años menos como simples nenazas y cómo de Niro pasea por el amanecer de Las Vegas con un anillo en las manos y la seguridad en el pensamiento. Pero eso no es bastante. No hay gracia en el asunto. Hay un leve intento de dejar un poso sobre la amistad que une a estos cuatro amigos que se juntan un fin de semana en Las Vegas pero se queda en nada porque la película se escora hacia la comedia de tintes burdos. Todo lo demás son los mismos tópicos de siempre: los consabidos chistes de la próstata, la pátina verde sobre los viejos que sueñan con echar una cana al aire, secuencias verdaderamente ridículas que no vienen a cuento y que no tienen ninguna gracia y, por supuesto, la admiración de todos cuando se cogen a estos cuatro tipos en cámara lenta y te das cuenta de lo que tenían dentro para que maravillaran tanto por todo el mundo.

Y es que la decrepitud no tiene por qué ser simpática aunque sí puede tener cierta gracia si uno tiene la capacidad de reírse de sí mismo. De hecho, ésa es la mayor virtud de la película. Los cuatro se ríen continuamente de sí mismos, como preguntándose qué diablos hacen en un sitio donde les pagan mucho y les favorece poco. Ni siquiera el contraste con una juventud que peca de soberbia funciona demasiado. Ni tiene gracia que, en determinado momento, les hagan pasar por mafiosos que están de vacaciones y a de Niro le llamen Noodles y él se haga el despistado cuando es uno de esos personajes que no se olvidan fácilmente y que él interpretó en Érase una vez en América, de Sergio Leone. Todo es solo un rato de esparcimiento muy mediocre que no contiene ni una borrachera memorable, ni una cima de carcajadas...quizá porque, en el fondo, los mitos se van apagando y vemos cómo aquellos actores que nos arrastraban hacia el cine cuando éramos jóvenes ya no tienen ni un argumento digno que representar. Solo oficio para regalar. Solo unas cuantas arrugas bien colocadas que, con un solo gesto, dicen más que muchos actores en la mayoría de las nuevas películas. Y eso es todo.

No hay comentarios

Los Comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.

Por favor al redactar tu comentario sobre EL TEMA, cuida las formas.
No utilices 'copiar y pegar' para grandes textos, ni mayúsculas en exceso. No poner textos en el nombre. No direcciones web externas. Mejor sin abreviaturas SMS. Los comentarios pueden ser borrados (ver Advertencia Legal)
.