No hay razones [Memento Mori]
José Antonio Sanduvete [colaborador].-
No hay razones para preocuparse, caballero. Todo está controlado. Usted mantenga la calma y espere pacientemente, que seguro que la situación se resuelve. Es una cuestión de tiempo que esto termine solucionándose.
No hay razones para tener miedo, señorita. No le va a pasar nada. Respire hondo y cuente hasta diez, verá las cosas de otra forma. El miedo es un sentimiento irracional, una muestra de desequilibrio. Usted no debería perder el control de sus estados de ánimo.
No hay razones para llorar, chaval. Tienes que ser fuerte y portarte como un hombrecito. Con llorar no arreglas nada y, para colmo, los demás pensarán de ti que eres un cobarde. Tú no quieres eso, ¿verdad? Piensa que, quizá, se necesite tu ayuda y, si estás llorando, las lágrimas no te permitirán ver con claridad.
No hay razones para pensar en negativo, chicos. Aunque estemos con el agua al cuello, al borde del abismo, aunque estemos condenados y nuestra vida penda de un hilo. No hay razones para ser pesimista. Dejemos que todo fluya, lo que tenga que ser, será.
Tampoco hay razones para ser optimistas, también es verdad. Pero eso es mejor no tenerlo en cuenta, por el momento. De hecho, haced como que no lo he dicho.
No hay razones para preocuparse, caballero. Todo está controlado. Usted mantenga la calma y espere pacientemente, que seguro que la situación se resuelve. Es una cuestión de tiempo que esto termine solucionándose.
No hay razones para tener miedo, señorita. No le va a pasar nada. Respire hondo y cuente hasta diez, verá las cosas de otra forma. El miedo es un sentimiento irracional, una muestra de desequilibrio. Usted no debería perder el control de sus estados de ánimo.
No hay razones para llorar, chaval. Tienes que ser fuerte y portarte como un hombrecito. Con llorar no arreglas nada y, para colmo, los demás pensarán de ti que eres un cobarde. Tú no quieres eso, ¿verdad? Piensa que, quizá, se necesite tu ayuda y, si estás llorando, las lágrimas no te permitirán ver con claridad.
No hay razones para pensar en negativo, chicos. Aunque estemos con el agua al cuello, al borde del abismo, aunque estemos condenados y nuestra vida penda de un hilo. No hay razones para ser pesimista. Dejemos que todo fluya, lo que tenga que ser, será.
Tampoco hay razones para ser optimistas, también es verdad. Pero eso es mejor no tenerlo en cuenta, por el momento. De hecho, haced como que no lo he dicho.
solo
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