EDITORIAL DE SEPTIEMBRE 2015

Nuevo curso político, más de lo mismo.-

Decía la canción que cuando llegaba septiembre todo era maravilloso, pero en Chiclana ha llegado con 35 parados más. Pueden parecer pocos, pero después de varios meses bajando y de sacar pecho el PSOE pocas semanas después de entrar como si el mérito fuera de ellos, vuelve la cruda realidad. Y esto no ha hecho más que empezar porque en los próximos meses seguirá subiendo, ya que la mayoría de los hoteles cerrarán hasta marzo.

A no ser que José María Román consiga convencerles de que no lo hagan con esa medida que dijo que iba a implantar, bonificándoles con el 50% del IAE si abren durante todo el año, cientos de chiclaneros irán a la oficina del paro. Estos hoteles no estarán abiertos todo el año si no les resulta rentable y desde hace muchos años no lo es.

En enero de este año los socialistas criticaban el cierre de los hoteles Meliá, Alborán, Fuentemar y Vinci por primera vez, como un fracaso del trabajo de Ernesto Marín en este apartado. El segundo lleva varios años haciéndolo, gobernando el PSOE también y como están las cosas con lo del tranvía, este año es casi obligado.

Por cierto, tan mal no lo harían cuando el concejal de Turismo, Stefan Schauer, al que criticaron con dureza por su trabajo, fue tentado por Román para que formara parte del equipo de gobierno, siendo del PP, por petición expresa de los hoteleros del Novo.

Seguimos con el empleo. Decía antes de las elecciones Cándida Verdier que el alcalde “no tiene vergüenza política por alardear de los planes de la Junta y apropiárselos”. Pues bien, ahora los socialistas hablan de los puestos de trabajo que se darán con proyectos de mayores y menores de 35 años como si fuera un trabajo suyo, cuando fue el anterior equipo de gobierno el que lo solicitó y lo dejó preparado para que a partir de septiembre empezaran a seleccionar a las personas que trabajarán.

SILENCIO CÓMPLICE

Hay otro asunto que está llamando la atención de los chiclaneros y es el silencio de la Asociación por un IBI Real, muy combativa cuando gobernaba el Partido Popular, al que pedían que bajara el IBI, que lo hizo y hasta tres veces, llegando casi al 50%, pero que no sirvió para que dejaran sus protestas y recogida de firmas cada semana en la puerta del Ayuntamiento.

Antes de las elecciones firmó con el PSOE un compromiso para una revisión total del catastro, así como la devolución del IBI indebidamente cobrado en los últimos años. Pues bien, dos meses y medio después de que Román cogiera el bastón de mando, esta plataforma no ha abierto la boca para quejarse de que los socialistas vayan a subir el IBI el próximo año en la misma proporción que el PP lo bajó, casi el 50%, alegando que no hay dinero y que los 8 millones de euros que el Consistorio dejó de cobrar por este motivo, tienen que recuperarlos.

Lo más sorprendente es que esta entidad fue invitada por el PSOE a una Mesa Presupuestaria inventada por este partido, con el fin de sembrar miedo aduciendo la falta de dinero para poder subir éste y demás impuestos. También estaban los Empresarios. El resto de federaciones vecinales y asociaciones como Hostelería o Comerciantes no tuvieron ese “honor”.

Sabiendo de primera mano las intenciones de Román de subir el IBI, la Plataforma sigue callada. Por lo visto ya no les preocupa pagar de más ni que les devuelvan lo cobrado indebidamente, que pidieron durante meses con tanta insistencia. Por tanto, nada nuevo bajo el sol.

El PSOE sigue incumpliendo sus promesas y sus asociaciones afines aplaudiéndoselo. El trabajo ya está hecho. Román está de nuevo en el sillón. Lo demás no importa. Objetivo cumplido. Ahora, a callar, que en boca cerrada no entran moscas.