Raúl Aragón y Ana Cristina Benítez triunfaron en la presentación de su disco “Rozándote el alma”

Lleno en la Bodega “Miguel Guerra”, con la presentación de Amador Mohedano, que regaló a Ana Cristina un abanico de Rocío Jurado.-

Raúl Aragón y Ana Cristina Benítez ya están habituados a los aplausos del público tras las innumerables actuaciones realizadas en los dos últimos años, sobre todo tras participar en el programa de Canal Sur “Se llama copla”. Pero seguro que recordarán para siempre la actuación del pasado domingo en la Bodega “Miguel Guerra”, ya que presentaron su disco “Rozándote el alma”, con gran éxito de público.
  
El evento contó con  un espectáculo ecuestre a cargo de Pedro Aguilar a caballo y Mari Carmen Casanova al baile. Hubo así mismo degustación de paella.
Luego vendrían las actuaciones con David Manito, Ángela Dionisio, Fran Ocaña, Nina Alemania, Adrián Caballero, David Roldán y Diego Carrasco, que se sumó a última hora y que dio mayor relevancia al acto, no en vano es uno de los grandes del flamenco.

Pero el numeroso público que llenó el recinto iba a ver a esta pareja que se ha ganado el corazón de los amantes de la copla. Y no salieron defraudados. Para empezar no faltó la emoción. El presentador fue Amador Mohedano, hermano de Rocío Jurado. Sabía que Ana Cristina es una ferviente admiradora de la desaparecida cantante y le regaló un abanico de ésta, que la chiclanera recogió entre lágrimas, mostrando su agradecimiento por el detalle.


PÚBLICO ENTREGADO

Después llegaron las canciones de copla, alguna de Rocío Jurado, primero a dúo, con Amador de testigo, y más tarde por separado, para finalizar el concierto los dos juntos en el escenario.

Los asistentes querían escuchar la canción de su disco, “Rozándote el alma”, y Raúl y Ana Cristina se vaciaron, provocando los aplausos y oles del público. Fue una tarde mágica, con un gran ambiente y rodeados de sus familiares, amigos y artistas, que no quisieron dejarles solos en un día tan importante.

Ahora a presentarla en otros lugares y que pronto lleguen más canciones y un disco completo. Calidad y saber estar sobre el escenario tienen de sobra para triunfar. Sólo necesitan más tablas, que se adquieren con actuaciones, y un empujoncito, sin olvidarnos de esa suerte siempre necesaria, sobre todo cuando se empieza.

La canasta coplera tiene buenos mimbres. Sólo hay que moldearlos poco a poco para que lleguen a alcanzar lo que tanto desean: el éxito y hacer lo que les gusta. De momento van por el camino adecuado.