El matrimonio afectado por el derrumbe del techo de su casa, pide que le cedan una vivienda municipal

No pueden entrar en ella, están viviendo con su hija y encima fueron estafados por la subdirectora de La Caixa, por lo que no disponen de dinero para arreglarla.-

Hace siete años llegó a Chiclana el matrimonio catalán formado por Ramón Sarriá y Pilar Gómez. Venían acompañando a su hija Meritxell y a su nieto, ya que éste es dependiente desde que nació, al tener varias enfermedades, algunas de ellas raras, que le han llevado por varias ciudades buscando una solución a sus males. Desde entonces no han dejado de sufrir adversidades de todo tipo, aunque la última de ellas, ocurrida el 17 de octubre, es la más grave.

 

Ese día se les cayó encima el techo del salón de su casa, en la calle la Vid, siendo aplastado Ramón y Pilar sufrir lesiones que le provocaron más dolores de los que ya tenía. Afortunadamente pueden contarlo. El esposo tiene 65 años y hace unos años sufrió un ictus que le ha dejado el lado izquierdo casi paralizado. Anda con mucha dificultad y también tiene problemas para respirar.

 

El día 17, domingo, Ramón se encontraba mal, por lo que Pilar lo acostó en el sofá y le puso el oxígeno. En el confinamiento lo pasaron muy mal por estos motivos, pero ningún médico se acercó a su domicilio, solo le daban instrucciones por teléfono.

 

Alrededor del mediodía el techo del salón en el que se encontraban, se vino abajo con gran estruendo y cayó encima de Ramón, que quedó cubierto de escombros y solo se le veía la cara. A su lado estaba su perro chiguagua Bill, que también sufrió el impacto del derrumbe, con heridas en la cabeza. El espaldar del sofá les salvó la vida, ya que evitó que impactara de lleno sobre ellos. Tiene moratones por todo el cuerpo.

ATRAPADO POR LOS ESCOMBROS

 

Pilar, por su parte, recibió el impacto de una de las vigas en la vértebra, que le ha causado fuertes dolores, acrecentando los que ya sufre desde hace tiempo, pues tiene una minusvalía del 63%. Desde entonces tiene que utilizar una faja y un corsé y le cuesta un mundo levantarse o acostarse. Se da la circunstancia de que ella es la cuidadora de su marido, pero en estos momentos lo tiene complicado.

 

Nada más caerse el techo, Ramón empezó a llamar a su mujer pidiéndole que le sacará de debajo de los escombros, pero ella no podía, por lo que salió a la calle y pidió ayuda a los vecinos. Rápidamente llegó Juan, del bar La Capilla, con su mujer, y su primo, del mismo nombre. Ellos llamaron a la policía, a los bomberos y a los sanitarios y mientras éstos llegaban consiguieron sacar a Ramón a la calle.

 

A éste le faltaba el aire, pero la llegada de la ambulancia le alivió. Rápidamente los trasladaron al hospital de Puerto Real, donde les hicieron numerosas pruebas, radiografías, un TAC y les dieron calmantes. Por la tarde recibieron el alta y regresaron a Chiclana. En su casa no se podían quedar, ya que había posibilidades de que la vivienda pudiera caerse. Los bomberos hicieron su trabajo, analizaron la situación y precintaron el inmueble.

 

Posteriormente lo haría la Policía Local, por lo que no pueden entrar para sacar sus cosas, ya que ha quedado todo allí, ropa, enseres, comida, electrodomésticos, etc. El arquitecto técnico municipal realizó una inspección dos días después, en cuyo informe refleja que toda la casa tiene un falso techo de escayola, por lo que no se puede apreciar si hay deterioro en el techo principal.

LA VIVIENDA NO ESTABA BIEN CUANDO LA COMPRARON

Urbanismo envió un escrito a los afectados con dicho informe y lo que tienen que hacer (quitar los escombros, apuntalar la vivienda si fuera necesario y reparar los desperfectos para evitar que tenga consecuencias para la finca colindante), prohibiéndoles la entrada en ella. En caso de hacer los trabajos requeridos deberán sacar su correspondiente licencia municipal.

 

Todo esto motivó que hayan tenido que ir a vivir con su hija, aunque las condiciones no son las más aconsejables y piden que el Ayuntamiento les dé una vivienda donde cobijarse mientras no arreglen la suya, que de momento no ha ocurrido. Se quejan de que nadie del Consistorio se haya preocupado lo más mínimo por su situación.

 

“Nos vemos desamparados, solos, nadie de Servicios Sociales se ha puesto en contacto con nosotros”, afirman. Como es lógico, llamaron al alcalde para pedirle una cita, pero tampoco lo lograron. Estaba muy ocupado en otros menesteres de mayor enjundia.

 

Según han podido saber por un inquilino anterior a ellos, la vivienda no estaba bien. El propietario intentó vendérsela, pero no aceptó y les ha informado de grietas en el techo y vigas deterioradas, por lo que la reformó colocando el falso techo citado anteriormente, evitando así que se apreciara los problemas que tenía. Al parecer, las obras no tenían licencia. El perito de la inmobiliaria que se la vendió les dijo que estaba bien.

RESPONSABILIDADES A QUIEN LES VENDIÓ LA CASA

 

Por ello, el pasado martes, día 26, le enviaron un escrito por burofax al anterior propietario, Antonio Alba Batuecas, así como a su esposa, que viven en Galdácano (Vizcaya), en el que les cuentan lo sucedido, señalando que “al grave peligro que han sufrido nuestras vidas, se añaden los daños físicos y morales de los que precisamos ser tratados”.

 

Les indican así mismo que la vivienda está inhabitable, “viéndonos desprovistos de nuestro único domicilio y de todos nuestros enseres, con el perjuicio económico que ello nos acarrea”. Es por ello que les hacen esta reclamación “por los perjuicios económicos, físicos y morales que sufrimos por los hechos descritos, en la responsabilidad que como vendedores les pertenece y que legalmente proceda, interrumpiendo la prescripción para el ejercicio de las acciones que nos puedan corresponder”, haciendo mención también a los perjuicios “que se puedan poner de manifiesto en el futuro”.

 

Ayer recibieron una notificación de Correos diciendo que han ido dos veces al domicilio de los antiguos propietarios de la casa y que no se encontraba nadie allí. Meritxell, la hija de Ramón y Pilar, llamó a Servicios Sociales para pedir una cita con el delegado, Francisco José Salado, pero se la dieron para el 11 de noviembre. Un chiclanero que se enteró de esto contactó con Soledad Ariza y ésta llamó al concejal, adelantando el encuentro a hoy jueves, a las 10,00 horas. A ver qué solución le da.

 

ESTAFADOS POR LA SUBDIRECTORA DE LA CAIXA

 

Finalmente reseñar que también ayer recibieron una propuesta para apuntalar la casa, con los estudios pertinentes, por importe de 1.705,50 euros más IVA, así como otro con los gastos del colegio de arquitectos y la realización de la obra por el mismo precio, sumando 3.411 euros entre ambos, más el IVA, lo que supera los 4.000 euros.

 

No disponen de dicha cantidad, por lo que tendrían que pedir un crédito, que tampoco pueden porque a ellos también les estafó la subdirectora de La Caixa, en la calle La Plaza, y lo han perdido todo, estando en este momento con una deuda de 31 euros con esta entidad bancaria, además de encontrase en la lista de morosos por las compras realizadas por la empleada de ese banco en Carrefur y otras firmas. Si no quieres caldo, dos tazas.

 

Pero esta es otra historia que les contaremos en otro capítulo, porque hay mucho que decir sobre las artimañas empleadas por esta trabajadora del mayor banco de España y la respuesta de éste a las denuncias de los afectados, que ascienden a 277, que son de juzgado de guardia.