Los candados del amor

David González [colaborador]
Personalmente los había visto en el puente de Triana, algún reportaje en televisión sobre los del puente Milvio de Roma y alguno llegue a ver en nuestro puente Chico, que tras remozar su cara vuelve a estar activo y con al menos un candado en sus barandillas.


Una costumbre traída a Sevilla seguramente por los erasmus italianos, y que en esa ciudad ya se ha convertido en tradición. Como señal de amor, los enamorados compran un candado en los chinos, se van al puente de Triana, lo cierran sobre los hierros de la barandilla, se dan un beso y tiran la llave al río. ¡ Olé ¡, ya te quiero para toda la vida y si algún día no ves el candado en el puente, asume las consecuencias (los candados sulen traer dos llaves).

La idea de colocar un candado, en el que los enamorados escriben sus iniciales, a las farolas del puente Milvio para después tirar la llave al río Tévere, surgió a partir del libro de Federico Moccia "Ho voglia di te" (Tengo ganas de ti) que se llevó a la gran pantalla en 2006.

Pues nada, a partir de ahora seguro que ardoros@s chiclaneros darán cuenta de su amor en nuestro puente Chico. Suerte para ellos, y no bajar a por la llave que a veces el río trae algo más que agua.

Vanessas del Rocio, Yeniiis, Deboras o Marias de la Yerais, tener en cuenta que si a vuestros maromos de turno con calzones por los tobillos se llamen Yonatan, Josuas, Kevin Cosner de Jesu o cualquier otro cani con moto a escape libre, les da un arrebato romántico, saber que el puente se acaba de arreglar y nos tiene que durar. Y que al ir a tirar la llave aún estáis a tiempo de tiraros con ella, los dos o por separado, que luego sin la píldora poscoital pasa lo que pasa. Que en las joyerías venden para estos casos, pequeños candaditos de oro para colgar de vuestros adorables cuellos, y que podréis coleccionar tantos como novios o novias os den los santos.