Carta abierta a los vecinos de Chiclana

“Plataforma de parados por un trabajo digno”.-

Llevamos dos años y medio de gobierno popular apoyado por el partido vecinal con Ernesto Marín como alcalde y Marisol Ayala como teniente de alcalde de Urbanismo respectivamente. Muchas promesas tras este tiempo y al día de hoy nos encontramos con una Chiclana sumergida como si se tratara de un circo, donde con llenar las calles de gente y lanzar nieve artificial ya han cumplido.

Pero la realidad es bien distinta. 4000 parados más, sin presupuesto para esta año, sin PGOU, sin tranvía, sin la remodelación de Sancti Petri, pérdida de nuestras banderas azules, conflicto en la Policía Local con el grupo Minerva, esteros de Carboneros
abandonados, etc.

Desde este colectivo solicitamos soluciones y lejos de hacerlo, no baja, no responde, ni se inmuta. Solo sale del despacho para hacerse la foto de rigor en la presentación de un cartel, inauguración Feria de la Tapa… Marín no se equivoca nunca y es así porque a tenor de las encuestas, quien posee el gobierno y no ejerce como tal no se quema.

Chiclana vive una nube, con cañones de nieve a su paso por las calles del centro. Solo vendiendo sombras de realidad. La política de autobombo emprendida por su gobierno (una copia mala de Cádiz, donde gobierna Teófila Martínez, PP) solo vende a través de los medios cualquier noticia que le favorezca. Un asfaltado, un pintado en la calle, que la gente se apunta a una maratón… Todo vale si es para vender esa política que nunca llega.

Se vanagloria que su Ayuntamiento es de los pocos saneados en la Bahía, pero no es entendible cómo en la fecha que estamos sigamos sin presupuesto municipal para una ciudad de 15000 parados. Algo ocurre. Las dos integrantes del Partido Vecinal (Marisol y Susana), cuya base electoral fue legalizar las casi 40000 viviendas ilegales que se supone existen en la ciudad, lejos de ello y al día de hoy, la primera solo sale para decir que el PGOU va bien y que llegará (no se sabe cuándo ni en qué condiciones) y la segunda solo sabe hacer una política de asfaltado cuando realmente lo que tienen que hacer es cumplir con su programa y de camino exigir por ética y coherencia política a su socio Marín que oiga a su pueblo, ese que se concentra en la puerta del Ayuntamiento.

En Burgos un vecindario ha salido en pie de guerra contra su Ayuntamiento porque pretenden hacer un bulevar, o en Melilla donde un plan empleo ha provocado las iras y con ello una guerra de guerrillas en la calle. Eso no puede ocurrir en Chiclana, precisamente porque aquí no hay bulevar y mucho menos un plan empleo que pueda provocar dichas protestas.

En definitivas cuentas, los vecinos de esta humilde ciudad debemos empezar a tomar conciencia que independientemente de lo mal que lo están haciendo los suyos en Madrid, con unos recortes brutales en sanidad, educación, dependencia, de las libertades públicas, etc., tenemos que empezar a valorar y hacer nuestra encuesta a tenor de lo que está ocurriendo en ella.

Hasta cuándo van a estar esas familias en la puerta del Ayuntamiento recordándole al señor Marín que se equivoca, que no pueden más, que hay muchas familias pasándolo mal, pero claro, si no gobiernas, si no tomas iniciativas, si no se inmuta ante dichos problemas y solo sale del despacho para inaugurar fiestas, difícilmente podrá la gente decir que Marín lo hizo ni bien ni mal.

Simplemente que durante cuatro años hemos tenido un gobierno cobrando de nuestros impuestos. Ya se acordarán dentro de año y medio de nosotros cuando vengan a pedirnos el voto, ese que hoy no le damos importancia por dejadez, desidia o quizás por resignación.