“JUCIL” Cádiz pide “contundencia" contra el agente corrupto de la Guardia Civil, “por venderse al narco y poner en peligro la vida de sus compañeros”

Es conocido como Cobe Brayan, natural de Chiclana, saboteaba las patrulleras de la lucha contra el narcotráfico e informaba por dónde y cuándo debía pasar la droga.-

La noticia de la detención de un guardia civil que colaboraba con los narcotraficantes, a los que informaba de cuándo y por dónde debían introducir la droga, así como inutilizando las patrulleras del Cuerpo, ha causado un gran revuelo. El sindicato JUCIL Cádiz exige “que la Justicia actúe con toda su contundencia en el caso del agente corrupto de la Guardia Civil, natural de Chiclana, conocido como Cobe Brayan”. (FOTOS: Operaciones antidroga efectuadas en la zona de Chiclana). 

Afirma que “este traidor no solo ha vendido su honor al narco, facilitando alijos millonarios y sabotajes a nuestras patrulleras, sino que ha puesto en riesgo mortal a sus propios compañeros, exponiéndolos directamente al fuego enemigo”.

Su colaboración con el clan El Hijo del Marqués implica “cohecho, pertenencia a organización criminal y omisión de deberes, con 214.000 euros hallados en su domicilio como prueba irrefutable. Ha alertado de operaciones, saboteado motores y proporcionado GPS para evadir controles, todo por 30.000 euros por lancha”.

QUE CAIGA TODO EL PESO DE LA LEY SOBRE ÉL

Agrega JUCIL que “traiciona a la institución y condena a sus hermanos de armas a situaciones de vida o muerte innecesarias”, reclamando “que caiga todo el peso de la ley sobre él y cualquier cómplice”. La prisión preventiva “es un primer paso, pero urge juicio rápido, penas máximas y depuración interna exhaustiva, para erradicar la corrupción que debilita nuestra lucha contra el narco en el Estrecho”.

Asevera el sindicato de la Benemérita que “no permitiremos que este cáncer mine la Guardia Civil, ni ponga a los agentes a los pies de los caballos. ¡Justicia plena para defender a los leales y castigar a los vendidos!”.

Reseñar que el guardia civil corrupto, de nombre José María, se comunicaba por una aplicación de mensajería, Signal, con los narcotraficantes y utilizaba palabras clave para referirse a las patrulleras. Estaba destinado en el Cuerpo de Mecánicos de Cádiz, donde se encargaba del mantenimiento de las barcazas de la Guardia Civil.

LA PATRULLERA RÍO IRO ERA SU NIÑA PARA LOS NARCOS

Informaba a los narcos de la situación de éstas y de los movimientos que sus compañeros llevarían a cabo, especialmente en la zona de la desembocadura del Guadalquivir en Sanlúcar de Barrameda, para que pudieran operar sin problema.

El diario El Mundo tuvo acceso a las conversaciones del guardia civil con los narcos. Les indicó cómo se referiría a la patrullera Río Iro, la más rápida del Servicio Marítimo: “Cuando te hable de la Iro, te hablaré de la niña. Si está averiada, te diré que está mala la niña. Si te digo que está mala, que puede ir al cole, es que tiene avería, pero anda”.

En otras grabaciones se oía preguntar cómo estaba la niña, si se encontraba mejor, respondiendo el guardia civil detenido que “en principio, en casa. Si mejora irá. Luego te digo. Se ha tomado el jarabe, a ver”. Así sabían los narcos si la patrullera Río Iro estaba o no operativa, si tenían el camino libre para llevar a tierra la cocaína por la desembocadura del Guadalquivir.

INGRESADO EN LA CÁRCEL PUERTO III

También les daba datos sobre la tripulación y la destreza del agente que estuviera a los mandos, sobre si estaba capacitado para una persecución o no: “Los que están allí con la Iro, media tripulación es de Cádiz. Si le aprietas no te sigue. Entra despacio y a las cuatro. Después le zumbas”.

El detenido está en prisión preventiva en Puerto III, en el Puerto de Santa María, en el módulo de funcionarios policiales. Tiene 52 años y es natural de Chiclana. Llevaba más de treinta años en la Guardia Civil.